Redacción
En su sesión del 28 de mayo de 2025, la Junta Monetaria decidió, por mayoría, mantener en 4.50% la tasa de interés líder de política monetaria, luego de realizar un análisis integral de la coyuntura económica nacional e internacional y evaluar el balance de riesgos de inflación.
Contexto internacional: crecimiento con riesgos persistentes
La Junta destacó que, si bien las proyecciones de crecimiento económico global se mantienen positivas, están sujetas a un entorno de elevada incertidumbre. Entre los principales factores de riesgo se encuentran la intensificación de tensiones comerciales y la persistencia de conflictos geopolíticos, que podrían afectar negativamente las perspectivas de crecimiento mundial.
En cuanto al precio internacional del petróleo, se observó una disminución moderada, situándose en niveles inferiores a los registrados a finales de 2024, como resultado de expectativas de un incremento en la oferta global de crudo. Asimismo, la inflación internacional ha seguido descendiendo, aunque todavía se mantiene por encima de las metas de varios bancos centrales, con riesgos inflacionarios aún presentes.
Situación interna: crecimiento moderado y baja inflación
En el plano interno, la Junta Monetaria subrayó que la actividad económica mantiene su dinamismo, reflejado en el buen desempeño de diversos indicadores de corto plazo. Sin embargo, advirtió sobre los riesgos vinculados a la incertidumbre global y a la moderación del crecimiento en algunos de los principales socios comerciales de Guatemala.
En cuanto a la inflación, el indicador a abril de 2025 se situó por debajo del límite inferior de la meta establecida (4.0% +/- 1 punto porcentual), debido principalmente a la reducción en los precios de los combustibles y a la disipación de choques de oferta que afectaron anteriormente el precio de los alimentos.
Las proyecciones actuales sugieren que la inflación se mantendría cerca del límite inferior de la meta durante 2025 y por debajo del valor central en 2026, lo que podría abrir espacio para una eventual flexibilización de la política monetaria en el corto plazo, si las condiciones lo permiten.
Compromiso con la estabilidad
La Junta Monetaria reafirmó su compromiso de actuar con prudencia y responsabilidad, adoptando las medidas necesarias para mantener la inflación dentro del rango meta. En este sentido, continuará monitoreando de forma rigurosa la evolución de los principales indicadores económicos, tanto externos como internos, que puedan incidir en el comportamiento de los precios y en las expectativas de inflación.
